Septiembre es el mes de la concienciación sobre el cáncer cerebral infantil, y de hecho los tumores cerebrales son el segundo grupo más común de cánceres infantiles y la principal causa de muerte por patología oncológica en menores de 19 años.
El cáncer mata a más niños que cualquier otra enfermedad: más que el asma, la fibrosis quística, la diabetes y el SIDA pediátrico, todos combinados.
Miles de niños y sus padres escuchan el aterrador diagnóstico de “tumor cerebral” pronunciadas por sus médicos cada año, y para esos pacientes y sus familias, el impacto de estas palabras resulta abrumador, al punto de cambiar sus vidas para siempre.
A la fecha no existe un estándar de cuidado uniforme para todos estos niños; lamentablemente, la ciencia solo dispone de muy pocos tratamientos y de ninguna cura.
Más allá de proporcionar recursos para la investigación científica, la National Brain Tumor Society (NBTS) está comprometida con su misión de encontrar mejores salidas terapéuticas y, en última instancia, de dar con una cura para los tumores cerebrales. Se viene trabajando intensamente incluso en una historia sobre el cáncer infantil y los tumores cerebrales pediátricos, ha comentado el David F. Arons, Director Ejecutivo de NBTS.
Los expertos explican que los tipos de cáncer que afectan a niños, son diferentes a los que atacan a los adultos, ya que estos últimos desarrollan esta enfermedad debido a la exposición a agentes cancerígenos, a malos hábitos alimenticios o al consumo de tabaco.
Las causas de los cánceres infantiles en la mayoría de los casos son desconocidas, pero los expertos consideran que la exposición a las toxinas en el ambiente durante el embarazo de la madre o en la niñez puede ser uno de los orígenes.
De su parte, la NBTS ha publicado los siguientes consejos para ayudar a crear mayor conciencia y apoyo para los pacientes, las familias y los individuos recientemente diagnosticados.
Tres cosas que debes saber sobre los tumores cerebrales
Siete síntomas para vigilar
Los síntomas del tumor cerebral pueden variar de acuerdo con el tipo y la ubicación del tumor. Hay momentos en que una persona puede no tener síntomas cuando se descubre el tumor cerebral; en otros casos pueden experimentar:
Diagnosticar un tumor cerebral puede ser un proceso complicado que exija el involucramiento de varios especialistas. El primer paso es realizar un escáner cerebral, generalmente una resonancia magnética. Una biopsia puede también ser necesaria, por lo que la muestra obtenida debe ser analizada por un patólogo que ayude a identificar el tipo de tumor cerebral.
Ocho términos sobre el cáncer cerebral que usted necesita saber
Fuente: National Brain Tumor Society
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