La palabra “lavado de cerebro” suele desencadenar asociaciones negativas. Pero nuestra salud cerebral seguramente depende de ello. Científicos de la Universidad de Oslo han realizado recientemente nuevos e importantes descubrimientos sobre cómo y por qué sucede esto cuando dormimos.

Los vasos sanguíneos en el cerebro se contraen y dilatan en ciertos patrones mientras dormimos y este es probablemente uno de los mecanismos clave que impulsan la eliminación de las sustancias de desecho dañinas de nuestro cerebro.

Según afirma Rune Enger, Profesor Asociado del Letten Centre, “Los descubrimientos alcanzados pueden ayudarnos a encontrar nuevas formas de tratar o incluso prevenir la enfermedad de Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas. Estos hallazgos también pueden ayudar a crear estrategias para administrar medicamentos al cerebro de manera más eficiente”.

El cerebro se está lavando cuando duermes

El “lavado de cerebro” o separación de desechos cerebrales es un proceso de eliminación de productos de desecho nocivos del cerebro. El cerebro produce continuamente sustancias de desecho y si se acumulan demasiadas, aumenta el riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas.

“El proceso de ‘lavado de cerebro’ es mucho más eficiente cuando estás dormido que cuando estás despierto. La razón de esto aún no está clara”, dice Enger, quien trabaja en el Instituto de Ciencias Médicas Básicas, y es el autor del nuevo artículo publicado en Nature Communications.

Los vasos sanguíneos en el cerebro se dilatan y contraen en ciertos patrones mientras dormimos

Los productos de desecho del cerebro se eliminan a lo largo de túneles especializados alrededor de los vasos sanguíneos del cerebro. Por lo tanto, el movimiento de los vasos sanguíneos podría afectar este proceso. Los investigadores hicieron que los ratones durmieran naturalmente y luego examinaron lo que sucedía en sus cerebros usando un microscopio láser avanzado.

Descubrieron que los vasos sanguíneos del cerebro, específicamente las arterias, se dilataban y contraían en ciertos patrones mientras los ratones dormían. Tales movimientos no se observaron en ratones despiertos. Estos movimientos probablemente bombean fluidos alrededor del cerebro cuando estamos dormidos, limpiando el cerebro de sustancias de desecho.

No solo el sueño profundo es importante para eliminar los desechos del cerebro

Hasta ahora, se creía que solo el sueño profundo estaba involucrado en esta limpieza de productos de desecho. Sin embargo, en este estudio, los investigadores observaron algo sorprendente: los vasos sanguíneos del cerebro se contrajeron y dilataron en patrones únicos para cada etapa del sueño de todo el ciclo del sueño, incluido el sueño profundo, el sueño REM e incluso los breves despertares que salpican nuestro sueño nocturno y son una parte natural de un ciclo de sueño.

Durante el sueño profundo, las arterias se dilataron y contrajeron lentamente, pero a medida que los ratones pasaban al sueño REM, estas oscilaciones se hicieron más pequeñas mientras la arteria se dilataba lentamente. En el sueño REM, las arterias permanecieron dilatadas antes de contraerse rápidamente al final de un ciclo de sueño al mismo tamaño que antes de quedarse dormido. Tales constricciones también ocurrieron durante breves despertares que experimentamos mientras dormimos.

“Es como si cada parte del ciclo del sueño tuviera su danza única de arterias cerebrales”, comenta la doctora Laura Bojarskaite.

El bombeo de los vasos sanguíneos aumenta el flujo de líquido cerebral y el transporte de moléculas

Los investigadores vieron que estas dilataciones y constricciones arteriales —dependientes del ciclo del sueño— afectaban el tamaño de los canales alrededor de los vasos sanguíneos que son importantes para el transporte de fluidos y moléculas en el cerebro. Estos canales se ensancharon y estrecharon al paso de los vasos sanguíneos, lo que llevó a Enger y sus colegas a creer que el flujo de fluidos también se vio afectado.

Luego, los investigadores pasaron a utilizar simulaciones y modelos informáticos biomecánicos.

“En resumen, descubrimos que las dilataciones y contracciones de las arterias y los cambios simultáneos en los canales que las rodean tenían un papel importante tanto en el flujo de fluidos como en el transporte de sustancias en el cerebro”, explica Kent-Andre Mardal, quien dirigió el trabajo de modelado por computadora en el estudio.

Los investigadores creen que este nuevo estudio puede explicar por qué el flujo de líquidos y la eliminación de desechos en el cerebro es diferente cuando se está dormido en comparación con cuando se está despierto e identifica la dinámica de los vasos sanguíneos durante el sueño como un objetivo potencial para la prevención de enfermedades neurodegenerativas y para mejorar la entrega de fármacos al cerebro.

Fuente: un artículo revisado por Emily Henderson, B.Sc., publicado en el portal www.news-medical.net

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