Mañana se celebra el Día del Médico Ecuatoriano, instituido en honor al natalicio de Francisco Javier Eugenio de Santa Cruz y Espejo, primer galeno del Ecuador, nacido el 21 de febrero de 1747.

Promover la salud, prevenir enfermedades, diagnosticar oportunamente, dar tratamientos eficaces y ayudar en la rehabilitación de quienes lo necesitan, son los objetivos principales de los doctores. A través de la celebración del Día del Médico se busca reconocer la digna labor de estos valiosos profesionales.

¿De qué están hechos los médicos?

De la misma materia de que están hechos los sueños, las pesadillas y, en ocasiones, de la falta de tiempo para dormir.

El médico es un profesional altamente calificado en materia sanitaria, capaz de dar respuestas por lo general acertadas y rápidas a problemas de salud, mediante decisiones tomadas habitualmente en condiciones de gran incertidumbre, y que precisa de formación continuada a lo largo de toda su vida laboral.

El principal objetivo del médico, y de la Medicina por extensión, es “cuidar la salud del paciente y aliviar su sufrimiento”. Con razón se afirma que “el médico pocas veces cura, algunas alivia, pero siempre debe consolar”.

Si bien en la actualidad varias son las razones personales, sociales y prácticas que motivan a un individuo a convertirse en médico, es preciso examinar también varios aspectos que iluminan su labor cotidiana, vinculados a un elemento vital: el factor científico. Revisemos aquí los más importantes:

• Trabajar en centros que irradien nuevo conocimiento que cambie la faz del sufrimiento humano.
• Dominar una parte poderosa de la ciencia y de la técnica, de enorme atractivo por su impacto en la salud del paciente.
• El esfuerzo por la innovación de la organización de servicios, y a la mejora de la investigación aplicada a la atención de los pacientes con los ensayos clínicos, los estudios observacionales y el conjunto que llamamos “medicina basada en la evidencia” (Evidence Based Medicine).
• El ansia del desarrollo de las ciencias médicas que sirve de acicate a la continua necesidad de formación continuada que caracteriza al médico.
• La producción de ética médica, que pone el contrapunto filosófico y deontológico al quehacer del médico clínico.

Cualidades que marcan la diferencia

Varias son las señas de identidad de aquellos profesionales auténticamente vocacionados al servicio médico. He aquí algunos aspectos que merecen ser resaltados:

• El trato digno al paciente y a los compañeros
• El control juicioso de la incertidumbre durante el encuentro con el enfermo
• La práctica de una ética de la ignorancia (compartir con el paciente nuestras limitaciones científicas)
• La práctica de una ética de la negativa (para rechazar aquello que no tiene sentido, firme pero amablemente, de pacientes, jefes y compañeros)
• Una enorme polivalencia en el limitado tiempo de la atención clínica.

Funciones

Y aunque todo hasta aquí pareciera obvio, es prudente señalar asimismo los cuatro principales grupos de funciones del médico moderno. A saber:

• Clínica: la atención a los pacientes.
• Formación: tanto su propia formación continuada, como el adiestramiento de estudiantes de Medicina. Además, de la educación de los ciudadanos.
• Investigación: para conseguir el mejor desarrollo e innovación de la Medicina.
• Administración y/o gestión: de los recursos humanos, materiales y financieros disponibles, y de la captación de nuevos apoyos socio-sanitarios.

La medicina: arte y ciencia al servicio de la sociedad

El pasado 3 de diciembre, en el marco de la conmemoración del Día Internacional del Médico, el Dr. Miguel Ángel Centeno, vicedecano de la Facultad de Ciencias Biomédicas y director de la carrera de Medicina de la Universidad Austral en Buenos Aires-Argentina, reflexionaba sobre la formación de los futuros profesionales en estos términos: “El alumno de Medicina necesita o, mejor dicho, debe aprender que un paciente es sobre todo una persona y su entorno familiar, social, espiritual y político”.

“La medicina es una profesión que sabe mucho, pero no sabe todo. Y es por eso que formar un buen médico no es una tarea sencilla por varias razones. La formación médica implica, además del conocimiento científico, el desarrollo de actitudes profesionales y humanas –que son lo mismo en realidad– como la compasión y el interés por el paciente”.

Por lo tanto, la sociedad en general es también un paciente que debe ser tratado con prevención, planificación y gestión eficaz.

Fuentes: sepeap.org / lanacion.com.ar

En Gamma Knife Center Ecuador, nuestro objetivo –como primer centro especializado del país para la atención de tumores y patologías cerebrales– se centra en cooperar con la más alta eticidad a quienes integran el cuerpo médico que a diario recibe en consulta a este grupo de pacientes.

Para ello les brindamos todo el apoyo técnico necesario que proporciona la aplicación de nuestro tratamiento de radiocirugía estereotáctica, que se sustenta en un método seguro, preciso e indoloro, el cual por su alto índice de eficiencia –según lo revela la estadística clínica–, resulta aconsejable en un gran número de casos, en virtud de los inobjetables resultados internacionalmente reconocidos.

Nuestro saludo y gratitud a todos los galenos que con su confianza nos permiten desde hace 11 años, materializar la meta de prevenir muertes evitables, y promover vidas con calidad.