Los pacientes con tumor cerebral primario (PBT) comúnmente sufren de insomnio y otros trastornos del sueño. El manejo de los síntomas relacionados con el sueño es una lucha a menudo reportada en esta población.

Según un estudio recientemente publicado, la terapia conductual cognitiva (TCC) para el insomnio es el tratamiento de primera línea para los trastornos del sueño. Sin embargo, hasta ahora no se ha evaluado la efectividad de este enfoque para las personas con un tumor cerebral primario.

Ashlee Loughan, PhD, de la Virignia Commonwealth University, y un grupo de investigadores realizaron una prueba piloto de TCC con 40 pacientes, durante seis semanas, mediante telesalud grupal. Los pacientes participantes completaron la recopilación de datos al inicio y después de la intervención.

Los investigadores evaluaron medidas que incluían el insomnio, la fatiga, el estado de ánimo y la calidad de vida, que fueron autoinformadas por los pacientes. La evaluación cognitiva consistió en medidas de atención, fluidez verbal y memoria.

Se utilizaron pruebas t pareadas (una herramienta para evaluar las medias de uno o dos grupos mediante pruebas de hipótesis) para analizar los efectos de la intervención a partir de los resultados del autoinforme, mientras que los efectos para los resultados cognitivos se analizaron con medidas repetidas ANCOVA (análisis de la covarianza) controlando por edad.

Un total de 34 pacientes completaron el ensayo. Los hallazgos revelaron mejoras significativas en los síntomas del insomnio y la fatiga. Los síntomas de depresión y ansiedad también se mitigaron.

En términos de funcionamiento emocional, cognitivo y social, se observaron mejoras. Los investigadores informaron que no se encontraron cambios cognitivos clínica o estadísticamente significativos.

“Este ensayo es el primero en evaluar preliminarmente la eficacia de la TCC un tratamiento no farmacológico para el insomnio, en pacientes con PBT”, concluyeron los investigadores. “Los resultados sugieren un beneficio prometedor de la TCC en la gravedad del insomnio, la fatiga, el estado de ánimo y la mayoría de los índices de calidad de vida para las personas que padecen un tumor cerebral primario e insomnio. Estos hallazgos respaldan un estudio adicional en un ensayo de viabilidad aleatorizado de fase IIb científicamente riguroso”.

¿Qué es la terapia cognitivo conductual?

La terapia cognitiva conductual (TCC) es una forma de tratamiento psicológico que ha demostrado ser eficaz para una variedad de problemas que incluyen depresión, trastornos de ansiedad, problemas de consumo de alcohol y drogas, problemas maritales, trastornos alimentarios y enfermedades mentales graves.

Numerosos estudios de investigación sugieren que la TCC conduce a una mejora significativa en el funcionamiento y la calidad de vida. En muchos estudios, se ha demostrado que la TCC es tan efectiva o más efectiva que otras formas de terapia psicológica o medicamentos psiquiátricos.

Es importante enfatizar que los avances en la TCC se han hecho sobre la base tanto de la investigación como de la práctica clínica. De hecho, la TCC es un enfoque para el cual existe amplia evidencia científica de que los métodos que se han desarrollado realmente producen cambios. De esta manera, la TCC se diferencia de muchas otras formas de tratamiento psicológico.

La TCC se fundamenta en varios principios básicos, que incluyen:

1. Los problemas psicológicos se basan, en parte, en formas de pensar defectuosas o inútiles.
2. Los problemas psicológicos se cimientan, en parte, en patrones aprendidos de comportamiento inútil.
3. Las personas que padecen problemas psicológicos pueden aprender mejores formas de afrontarlos, aliviando así sus síntomas y siendo más eficaces en sus vidas.

El tratamiento de la TCC generalmente involucra esfuerzos para cambiar los patrones de pensamiento. Estas estrategias pueden incluir:

• Aprender a reconocer las propias distorsiones en el pensamiento que están creando problemas y luego reevaluarlas a la luz de la realidad.
• Obtener una mejor comprensión del comportamiento y la motivación de los demás.
• Usar habilidades de resolución de problemas para hacer frente a situaciones difíciles.
• Aprender a desarrollar un mayor sentido de confianza en las propias capacidades.

El tratamiento de la TCC también suele implicar esfuerzos para cambiar los patrones de comportamiento. Estas estrategias incluyen:

• Enfrentar los propios miedos en lugar de evitarlos.
• Usar el juego de roles para prepararse para interacciones potencialmente problemáticas con otros.
• Aprender a calmar la mente y relajar el cuerpo.

No todas las TCC utilizarán estas estrategias. Más bien, el psicólogo y el paciente trabajan juntos, de manera colaborativa, para desarrollar una comprensión del problema y desarrollar una estrategia de tratamiento.

La TCC pone énfasis en ayudar a las personas a aprender a ser sus propios terapeutas. A través de ejercicios en la sesión, así como ejercicios de “tarea” fuera de las sesiones, se ayuda a los pacientes a desarrollar habilidades de afrontamiento, mediante las cuales pueden aprender a cambiar su propio pensamiento, emociones problemáticas y comportamiento.

Los terapeutas de las TCC enfatizan lo que está sucediendo en la vida actual de la persona, en lugar de lo que ha provocado sus dificultades. Se necesita cierta cantidad de información sobre la historia de cada uno, pero el enfoque es principalmente avanzar en el tiempo para desarrollar formas más efectivas de enfrentar la vida.

El estudio completo, intitulado Mejora del insomnio en pacientes con tumores cerebrales primarios mediante terapia cognitiva conductual: resultados de un ensayo piloto NRG NCORP apareció en la revista Neuro-Oncology.

Fuente: un artículo de Giuliana Grossi publicado en el portal www.hcplive.com

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