La pandemia de coronavirus ha provocado un cambio mundial en la forma de vida de las personas, colocando a muchos en el exilio autoimpuesto para evitar la propagación del contagio.
Pero es importante recordar que cuatro de cada cinco personas infectadas tendrán síntomas leves, tal vez tan leves que no se noten, señalan los expertos.
“Alrededor del 80% de las personas contraen una enfermedad muy leve y se recuperan sin incidentes. Es importante darse cuenta”, dijo el Dr. Robert Glatter, facultativo de medicina de emergencia del Hospital Lenox Hill en la ciudad de Nueva York.
Según los expertos, 15% de las personas infectadas con coronavirus presentan síntomas más graves y un 5% desarrollan enfermedades potencialmente mortales.
El actor Idris Elba es posiblemente el caso leve de COVID-19 más famoso del mundo. Elba dio positivo por coronavirus después de estar expuesto a otra persona infectada, pero dice que no tenía ningún síntoma.
Aun así, Elba tiene asma, y en un chat en vivo en Twitter —hace un par de semanas— dijo que le preocupaba cómo el virus podría afectarlo en los próximos días.
“Sí, por supuesto que estoy intranquilo. Estoy preocupado por tener asma y cómo esta condición podría complicar las cosas muy rápidamente”, dijo Elba.
Esa no es una preocupación insignificante. Las personas con un caso menor de COVID-19 lidiarán con síntomas leves durante una semana o 10 días; no obstante sus casos pueden empeorar.
El Dr. Aaron Glatt, presidente de medicina en Mount Sinai South Nassau en Nueva York, dijo: “Tenemos algunos datos generales que sugieren que las personas que presentan síntomas durante un corto período de tiempo, pueden progresar y pueden estar más enfermos durante una semana o incluso dos semanas”.
La forma en que el virus funciona dentro del cuerpo brinda a la mayoría de las personas una buena oportunidad de desarrollar solo una enfermedad leve, dijo Glatter.
El coronavirus tiende a desprenderse muy temprano en la infección por COVID-19, lo que “en realidad es bueno porque produce altos niveles de anticuerpos [del sistema inmune] que son agentes protectores”, dijo Glatter.
Glatter comparó el COVID-19 con el SARS (síndrome respiratorio agudo severo), que generó pánico en todo el mundo en 2002-2003, y tuvo una tasa de mortalidad mucho más alta. Esto debido a que el virus alcanzó su punto máximo más tarde en la enfermedad, después de que esta llegó a los pulmones.
“Cuando eliminas el virus a niveles altos desde el principio, creas anticuerpos y estos se vuelven tus protectores”, dijo Glatter. “Con COVID-19, el virus se eliminó en los primeros días de la enfermedad, no cuando se desarrolló una enfermedad pulmonar grave”.
Elizabeth Schneider, residente de Seattle, se encuentra en el 15% de las personas con síntomas más graves que aún eran manejables en el hogar.
Schneider sospecha que contrajo el virus en una fiesta celebrada en casa el 22 de febrero, le dijo a CNN. En tres días se sintió fatigada y sufrió dolores en el cuerpo y dolor de cabeza . Su temperatura subió hasta los 39,5 C.
Schneider dio positivo por coronavirus, pero se recuperó después de quedarse en casa, descansar y tomar remedios de venta libre.
“Creo que la gran conclusión que quiero manifestar a todos es: por favor, no se asusten“, dijo Schneider. “Si estás sano, si eres más joven, si te cuidas bien cuando estás enfermo, te recuperarás. Yo soy una prueba viviente de eso”.
En general, las personas mayores tienen un mayor riesgo de padecer síntomas graves, pero ese no siempre es el caso, dijo Glatt. Las enfermedades crónicas como la obesidad, los problemas pulmonares y los problemas cardíacos podrían aumentar la probabilidad de que los jóvenes se enfermen.
Según Glatt, “una persona mayor sana con buenos pulmones y en buena forma podría estar mejor que una persona más joven con un historial de tabaquismo“.
Las personas que dieron positivo para COVID-19 deberían tener dos pruebas negativas con al menos 24 horas de diferencia antes de que se consideren que ya no son contagiosas, dijo. Sin embargo, no deberían suponer que ahora tienen inmunidad.
Las infecciones ordinarias por coronavirus que causan el resfriado común no producen inmunidad duradera, dijo Ira Longini, codirector del Centro de Estadística y Enfermedades Infecciosas Cuantitativas del Instituto de Patógenos Emergentes de la Universidad de Florida en Gainesville.
“Pueden infectarse una y otra vez, y realmente no sabemos para este nuevo coronavirus si eso también es cierto”, anotó Longini. “Ya existe evidencia anecdótica de reinfecciones, pero realmente no lo sabemos”.
También existe una fuerte preocupación de que los casos menores están impulsando la pandemia de COVID-19, porque las personas no están lo suficientemente enfermas como para saber que son contagiosas.
Alrededor del 86% de los casos de COVID-19 en China no se detectaron durante el aumento de dos semanas de la epidemia en el mes de enero, antes de que el país implementara restricciones de viaje, informaron investigadores en la revista Science.
Los casos leves son aproximadamente la mitad de infecciosos que aquellos con síntomas más severos, concluyó el investigador principal Jeffrey Shaman, profesor de ciencias de la salud ambiental en la Escuela de Salud Pública Mailman de la Universidad de Columbia, en la ciudad de Nueva York. Pero debido a que hay muchos más casos leves, “están impulsando la propagación y el crecimiento del brote”, dijo Shaman.
“El virus se nutre de la capacidad de las personas para mezclarse y encontrarse”, explicó Shaman. “Entrar en contacto innecesariamente en este punto es algo que la gente realmente debería considerar restringir“.
Fuente: un artículo de Dennis Thompson
reportero de HealthDay News publicado en el portal www.medicinenet.com
Nos hemos quedado en casa. Es lo que se nos ha pedido reiteradamente para ayudar a controlar la expansión del coronavirus. Solo juntos y de esa forma podremos frenarlo. ¡No hay otra opción! Salvo las salidas imprescindibles, tenemos que permanecer encerrados todo el tiempo posible.
Respetando a rajatabla las instrucciones que determinen las autoridades de salud y desde casa facilitaremos que no haya más trabajo del que ya hay en los hospitales, y estaremos más seguros de que no se lo contagiaremos al vecino en caso de tenerlo (y no saberlo) o que nosotros nos convirtamos en otra víctima más del COVID-19.
Sin embargo, frente a determinadas excepciones en las que usted deberá salir al exterior, tales como hacer una compra necesaria de víveres, acercarse a la farmacia, sacar de paseo al perro o ir de manera obligatoria al trabajo, recuerde seguir con absoluto rigor todos los protocolos establecidos de modo imperativo y manejarse siempre con mucho cuidado.
Estamos seguros en nuestra fortaleza, pero podemos sin darnos cuenta meter el virus en casa o tener ya dentro a una persona contagiada. Por nosotros mismos y por los que nos acompañan en la cuarentena todas las recomendaciones cobran más valor; su difusión en todos los medios no pretende atosigar a nadie sino ayudar a la comunidad a estar más segura y a precautelar su bienestar.
Salir indiscriminadamente es estar doblemente expuestos. Por tu vida y la de los que amas: #QuedateEnCasa
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