La gran mayoría de los meningiomas son tumores cerebrales benignos de crecimiento lento que se forman en la capa externa del cerebro y la columna vertebral. Los meningiomas son el tipo más común de tumor cerebral no canceroso. Sin embargo, son extremadamente raros.

A menudo, un meningioma está presente sin ningún síntoma obvio, lo que puede dificultar su identificación y diagnóstico. El tumor solo se puede descubrir de manera incidental a través de pruebas de imagen para otra afección.

Dado que el tumor crece lentamente, los síntomas tienden a desarrollarse durante un período prolongado. Según el tamaño, la ubicación del tumor y la parte del cerebro o la columna vertebral afectada, los síntomas variarán. Si bien el tumor no es canceroso, a medida que crece, los síntomas pueden volverse más graves o debilitantes y, en algunos casos, pueden poner en peligro la vida.

Este artículo revisará los síntomas comunes de un meningioma a los que usted debe prestar atención, y cuándo es posible que requiera consultar a un médico.

Síntomas comunes

Los síntomas del meningioma varían según el tamaño y la ubicación del tumor. Dado que los meningiomas son de crecimiento lento, los síntomas suelen acumularse con el tiempo. Esto puede hacer que los primeros síntomas sean fáciles de pasar por alto o ignorar. Muchas personas nunca sienten ningún síntoma.

A medida que el tumor crece, puede presionar el tejido blando del cerebro y eventualmente crecer hacia el tejido cerebral. En tanto el tumor aplica más presión al cerebro, suelen aparecer síntomas neurológicos. Los síntomas pueden incluir:

Dolor de cabeza. Este es el síntoma más común de un meningioma. La mayoría de la gente dice que el dolor de cabeza es sordo y ocasionalmente punzante. La mayoría de las veces, solo puede sentirlo en la parte frontal de la cabeza, tanto en el lado izquierdo como en el derecho. Sin embargo, el lado del tumor a menudo se siente un poco peor. Estos dolores de cabeza empeoran por la mañana, a medida que el paciente se despierta, y mejoran gradualmente a lo largo del día.

Pérdida del olfato. Los meningiomas en la parte frontal del cerebro pueden presionar los nervios que envían y reciben información sobre el olor.

Cambios en la visión. La pérdida parcial o total de la visión, que a menudo ocurre en un solo ojo, puede ser una señal de que un tumor está presionando el nervio óptico. Usted también puede notar que su visión se vuelve borrosa o que comienza a ver doble.

Pérdida auditiva. Puede experimentar una reducción en su capacidad de oír si el tumor afecta el nervio responsable de la audición.

Cambios en los pensamientos o la personalidad. Los meningiomas grandes pueden afectar la función cognitiva, cambiando la forma en que las personas piensan o reaccionan ante determinadas situaciones. Por ejemplo, algunas personas se irritan más fácilmente o pierden interés en un pasatiempo u otras actividades favoritas. La pérdida de memoria y los problemas para concentrarse también pueden ser síntomas.

Convulsiones. Alrededor del 20% al 50% de las personas que tienen un meningioma experimentarán una convulsión. Algunos individuos experimentan convulsiones menos obvias, que solo afectan su visión o habla durante unos segundos. Otros pueden desmayarse, ponerse rígidos o experimentar espasmos musculares incontrolables.

Síntomas raros

Solo el 10% de todos los meningiomas se forman a lo largo de la columna. Cuando el tumor aparece en la columna, los síntomas también pueden ser diferentes.

A medida que el meningioma se agranda o si este presiona un nervio de la columna, pueden aparecer síntomas como dolor o incluso parálisis en la parte del cuerpo afectada.

Los síntomas comunes de un meningioma espinal incluyen:

• Oleadas severas de dolor de estómago
• Dificultad para orinar o vaciar los intestinos
• Dificultad para caminar
• Pérdida de sensibilidad en brazos o piernas
• Dolor de pecho

Complicaciones

Al igual que con cualquier condición médica, existe la posibilidad de complicaciones. A veces, estas provienen de la afección en sí. Otras veces son producto del tratamiento.

Dado que el tratamiento del meningioma a menudo incluye la extirpación quirúrgica, el riesgo de efectos a largo plazo es mayor.

Algunas complicaciones a largo plazo de un meningioma incluyen:

• Problemas para mantener la concentración
• Pérdida de memoria
• Cambios de personalidad
• Debilidad en brazos o piernas
• Dificultad para entender el idioma
• Convulsiones

Factores de riesgo

Entre los factores de riesgo de un meningioma, se incluyen los siguientes:

Tratamiento con radiación. La radioterapia que implica a la cabeza puede aumentar el riesgo de tener un meningioma.

Hormonas femeninas. Los meningiomas son más comunes en las mujeres. Esto podría significar que las hormonas femeninas pueden ser un factor. Algunos estudios también demostraron un vínculo entre el cáncer de mama y el riesgo de meningioma relacionado con la función de las hormonas. Algunas investigaciones sugieren que el uso de anticonceptivos orales y la terapia de reemplazo hormonal podrían aumentar el riesgo de que se desarrolle un meningioma.

Afección del sistema nervioso hereditaria. La afección poco frecuente de neurofibromatosis tipo 2 aumenta el riesgo de tener meningioma y otros tumores cerebrales.

Obesidad. Un índice de masa corporal alto es un factor de riesgo para muchos tipos de cáncer. En varios estudios a gran escala se descubrió que los meningiomas se dan con más frecuencia en personas obesas. Sin embargo, no queda claro el vínculo entre la obesidad y los meningiomas.

Cuándo acudir al médico

Es muy raro que una persona con meningioma experimente una situación en la que necesite atención de emergencia. Dado que se trata de tumores de crecimiento lento, los síntomas suelen empeorar durante un período prolongado. Durante este tiempo, los médicos a menudo encontrarán la causa antes de que ocurra una emergencia.

Muchas personas verán a su médico por una lesión en la cabeza, un fuerte dolor de cabeza o una infección de los senos nasales aparentemente interminable. Durante su examen, el médico sugerirá una resonancia magnética o una tomografía computarizada para ayudar a diagnosticar el problema. Durante la exploración, es posible detecte el meningioma por accidente en la exploración de ese momento.

Si su médico encuentra un meningioma y usted no tiene síntomas, esto suele ser una buena señal. Por lo general, significa que el tumor es pequeño. También significa que el tumor se está alejando de áreas críticas del cerebro. Muchas personas con meningiomas pequeños y sin síntomas, simplemente necesitarán una resonancia magnética anual para asegurarse de que nada cambie.

Dicho esto, si usted o un ser querido experimentan dolores de cabeza persistentes que no desaparecen o empeoran, o notan síntomas neurológicos como cambios en la personalidad, convulsiones o una variación repentina en su visión o audición, cabe consultar a su proveedor de atención médica para determinar qué está ocasionando tales síntomas.

Un mensaje de Gamma Knife Center Ecuador

Los meningiomas son poco frecuentes, por lo que es poco probable que sus síntomas conduzcan a un diagnóstico de este tumor. Sin embargo, es importante consultar a un especialista si nota síntomas neurológicos. Un profesional médico puede ayudarlo a determinar qué está sucediendo y orientarlo hacia las mejores opciones de tratamiento para su situación. La prevención asegura bienestar y calidad de vida.

Fuente: un artículo de Krystina Wagner publicado en el portal www.verywellhealth.com

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